bordados de lagarterana

Bordados de Lagartera

Segun http://es.wikipedia.org/wiki/Bordado_de_Lagartera   en plural bordados de Lagartera y es de los bordados más importantes dentro de España. También se denomina como labores de lagartera. Son obras poco comerciales por su gran laboriosidad su cuidadoso acabado y su diseño. Dentro de esta categoría, están todas las obras antiguas, las piezas que se cosen para los ajuares particulares de los lagarteranos y gran parte de los trabajos de los Artesanos Lagarteranos.

Fotos de Lagartera

 El barrio más antiguo de Lagartera se llama “toleíllo”, y siendo la iglesia la más antigua de toda la comarca, que pagaba tributo a la Catedral de Ávila.

Corpus Christi en Lagartera

En Lagartera, los ritos tradicionales como la custodia de la hostia y la procesión que antecede a la celebración de la homilía siguen un trazado que se mantiene desde el siglo XIII: desde la iglesia del Salvador inicia el recorrido pasando por la Corredera de los Toros y continuando por las calles de Alonso Herrero, la calle Real, la del Curato, y por la Plaza del Comercio y de la Iglesia hasta retornar al templo.
Lo particular de esta fiesta en Lagartera es la presencia fundamental de mujeres y hombres vestidos con los tradicionales trajes lagarteranos, coloridos y también por la presencia en las calles de las artesanías que son tan propias del lugar y especialmente por los tejidos hechos a mano con motivos y diseños medievales. Los pequeños altares en las puertas de las casas por las calles que atraviesa la procesión lucen siempre manteles, pañuelos y tejidos muchas veces muy antiguos.

Historia de Lagartera

Varias son las etimologías que se han propuesto para explicar el nombre de este ilustre pueblo. Unos piensan que viene de "lagarto" (lugar abundante en este tipo de reptiles). Otros piensan que viene de "lagar" (de aceite). Y en general se piensa que el nombre deriva del fundador medieval, "el do Gartera". el cual se habría asentado en las orillas del arroyo para explotar unos molinos.

Parece que la repoblación del lugar, tras la reconquista, debieron hacerla mozárabes. Lo cierto es que a finales del siglo XIII consta el pueblo entre la mayoría de los de la comarca que terminarán engrosando el Señorío de Oropesa a mediados del siglo XIV. Bajo la égida de los Alvarez de Toledo discurrirá la vida de Lagartera hasta 1642 en que alcanzará el Privilegio de Villazgo, proclamándose "villa en sí y sobre sí".
Debió poseer una primitiva iglesia en el extremo noreste del Barrio de Toledillo, pero la actual Iglesia Parroquial se construye en la segunda mitad del siglo XV, de estilo gótico tardío con ciertos rasgos mudéjares. Se dedica a la advocación de El Salvador. La tone es muy tardía, del siglo XIX, obra del maestro arquitecto Lomba.

Ya a fmales del siglo XV y comienzos del XVI se tienen noticias de la afición de las mujeres de Lagartera al arte de la aguja, en calidad de labranderas y bordadoras: la noble doña Juana de Toledo, viuda del I Conde de Orgaz, tenía en el palacio del castillo de Oropesa tres labranderas lagarteranas a su servicio, llamadas Catalina, Ana e Isabel. Pasando los años Lagartera se convertirá en la capital nacional del bordado popular, quedando su nombre unido al más excelente rigor artesano.

Una antigüedad de más de tres siglos confrere solera y grandeza al Corpus Christi lagarterano, cuya procesión es una impresionante manifestación, no sólo de fervor religioso, sino de la artesanía del bordado tradicional. Julián García Sánchez, hijo ilustre del pueblo y su principal estudioso en nuestro tiempo, dedicó un libro a describir los pormenores de la procesión y el lujo de los altares. En 1662 se aplicaron los 536.000 maravedíes, que el Ayuntamiento poseía de un juro concedido años atrás por Felipe IV, en comprar la bella custodia de plata dorada en forma de sol, que aún hoy día Luce en la procesión.

Y las labranderas lagarteranas se pusieron a bordar y bordar y no han dejado de hacerlo hasta la fecha, para dar el mayor lujo posible a los altares del recorrido procesional. Hasta 30 altares, repletos de delicadísimos bordados, se han llegado a montar en la Procesión del Corpus de Lagartera
El devenir histórico del pueblo ha sido el de un progresivo crecimiento: a finales del siglo XVIII rondaba los 1.500 habitantes, a mediados del XIX los 2.000 y en 1960 alcanzaba la cifra más alta con cerca de 3.000. A partir de esa fecha se inicia un evidente descenso de población, como en todos los pueblos de la comarca.

Lagartera ha sabido conservar su tipismo tradicional y el pintoresquismo colorista de sus atuendos y de su folkclore. Pintores como Gutiérrez Solana, Sorolla y otros han plasmado en inolvidables obras escenas y tipos lagarteranos. Músicos como Jacinto Guerrero han inmortalizado en canciones como "Las Lagarteranas" el legado tradicional del pueblo. Hoy Lagartera es sinónimo de gusto artesano y entrañables tradiciones toledanas.

Las casas de Lagartera conservan ese sabor añejo de la vieja distribución de una casa de labrador: la cocina, a la que se accede desde el patio de entrada, presididas por la chimenea con sus Hares, potes y pucheros; el portal, especie de distribuidor cuyas paredes se muestran repletas de platos de cerámica y donde no faltan las cantareras, alguna espetera y bordadas "porteras" en los dinteles de las puertas de las habitaciones; la sala, adornada con estampas y cuadros religiosos; y el solano, especie de balcón de madera orientado hacia el sol, donde en invierno se reúnen las mujeres para coser.

El 30 de mayo de 1999 se inauguró en Lagartera el Museo Municipal "Marcial Moreno Pascual". En é1 se puede admirar la reconstrucción de una casa tradicional lagarterana, 50 dibujos y 33 óleos del célebre pintor lagarterano que da nombre al Museo y una interesante muestra del bordado popular que se conoce como "labores de Lagartera", entre las que sobresale el típico traje lagarterano, que con tanto primor, exuberancia y delicadeza exhiben las jóvenes del pueblo en ocasiones de fiestas, procesiones y bodas.

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